El Manual revisado del boy scout es un ensayo de culto escrito en 1970 por William Burroughs. Durante años se mantuvo deliberadamente oculto ya que, según su propio autor, podía llegar a ser tan inspirador y contagioso que desatase consecuencias devastadoras. Inevitablemente envuelto en misterio y reivindicado por numerosos artistas contraculturales, está íntimamente relacionado con su novela Los chicos salvajes. El Manual revisado del boy scout puede ser leído como un auténtico manual terrorista o una fantástica comedia. O puede que sea ambas cosas a la vez. Este es el libro de cabecera de los nuevos wild boys, los (revisados) boy scouts, es decir, las fuerzas de choque de una revolución violenta cuyo objetivo es la liberación total del ser humano.
El Manual revisado del boy scout es posiblemente uno de los mejores ensayos de Burroughs y, con absoluta seguridad, el más radical en sus métodos de guerra física, sus afirmaciones sobre la política y el control, y sus intentos por aterrorizar a los verdaderos terroristas.
En esta obra no encontrarás cut-ups ni experimentación formal, sino un virulento y despiadado llamamiento a la revolución. Este es el Burroughs que siempre deseaste leer. Esto es otra cosa. Es el (otro) Libro Rojo de Mao, el Catecismo Revolucionario de Necháyev y Bakunin o el célebre Libro de cocina del anarquista. Es lo que siempre deseaste leer de un Burroughs en su mejor momento, un documento ácido capaz de provocarte una carcajada mientras el autor describe sus particulares métodos terroristas. Si el mundo que aparece en Los chicos salvajes es el resultado de un cataclismo ecológico, social y económico (las calles están desiertas, la gasolina escasea y las comunicaciones fallan), el Manual revisado del boy scout podrían ser las últimas palabras de un condenado a muerte. Todo con tal de evitar la destrucción, de destruir la maquinaria policíaca y dogmática. Todo con tal de asegurar la supervivencia en el planeta.